CUELLO – HOMBRO - CODOS
En artículos
anteriores hemos hablado de las partes que conforman el SME y cuáles son las
patologías que generalmente aparecen en estas regiones. En los artículos
siguientes hablaremos de los TME según el área específica de donde aparecen. En
este sentido hablaremos de las dolencias que afectan al cuello, al hombro y por
ultimo y no mas importante el codo.
EL CUELLO
Según Åsa Kilbom, el dolor y las molestias en el cuello son algunos de
los síntomas más comunes asociados al trabajo. Estos aparecen tanto en el
trabajo manual con amplia demanda física como en el trabajo sedentario, y los
síntomas a menudo persisten durante períodos prolongados; de hecho, en algunos
casos durante toda la vida.
De ello se deduce que los trastornos del cuello son difíciles de curar
una vez que han aparecido, por lo que se debe prestar la máxima atención a la
prevención primaria. Tres son las principales razones por las que los
trastornos del cuello son frecuentes en la vida laboral:
- La carga sobre las estructuras del cuello se mantiene durante períodos prolongados
debido a las elevadas demandas visuales del trabajo y a la necesidad de
estabilización de la región del cuello-hombros cuando se trabaja con los
brazos.
- Los trabajos psicológicamente exigentes, con grandes demandas en cuanto a
concentración y a calidad y cantidad de trabajo son frecuentes, y producen
una mayor actividad de los músculos del cuello. Esta tensión aumenta más
si el trabajo es en general psicológicamente estresante, debido por
ejemplo a malas relaciones laborales, a la escasa influencia sobre la
organización del trabajo y a motivos similares.
- Los discos y las articulaciones del cuello
son a menudo asiento de cambios degenerativos, cuya
prevalencia aumenta con la edad. Ello reduce la capacidad de soportar las
sobrecargas de trabajo.
Posterior
a la revisión de estas razones, continuaremos con los factores de riesgo específico
asociados a estas condiciones:
La
Postura
La flexión,
extensión, curvatura lateral y torsión prolongadas del cuello producen fatiga
muscular y pueden dar lugar a lesiones musculares crónicas y cambios
degenerativos de la columna cervical.
Los
Movimientos Repetitivos
Los movimientos
repetitivos de las manos aumentan las demandas para la estabilización de la
región del cuello y hombros, aumentando así el riesgo de problemas cervicales.
Factores como las altas demandas de velocidad y precisión de movimientos, así
como las grandes demandas de fuerza ejercida por las manos, implican demandas
aún mayores de estabilización de las regiones proximales del cuerpo.
Factores
psicológicos y sociales
Se han destacado especialmente factores como
el estrés psicológico percibido, el mal control de la organización del trabajo,
las malas relaciones con los superiores y los compañeros y de trabajo y las
altas demandas de exactitud y rapidez en el trabajo. El mecanismo probablemente
sea un aumento de la tensión en el trapecio y otros músculos que rodean el
cuello, como parte de una reacción general de “estrés”.
Factores
individuales
Características individuales como la edad,
sexo, fuerza y resistencia muscular, la capacidad física para el trabajo,
tamaño corporal, personalidad, inteligencia, hábitos en el tiempo libre
(actividad física, consumo de tabaco, alcohol, dieta) y TME anteriores han sido
tenidos en cuenta, como factores que podrían modificar la respuesta a las
exposiciones físicas y psicosociales.
Las mujeres suelen presentar una mayor
prevalencia de síntomas en el cuello que los varones. La explicación más
probable es que la exposición a los factores de riesgo físicos y psicosociales
es mayor en el sexo femenino, como ocurre en los trabajos con monitores, el
montaje de pequeños componentes y la costura a máquina.
HOMBRO
Una de las estadísticas que más llama la
atención con respecto a las patologías del hombro es que hasta un tercio de las
mujeres y una cuarta parte de los varones se quejan de sensación de dolor en
cuello y hombros a diario o cada dos días. En este sentido nombraremos los
huesos que forman el hombro: la clavícula, la escápula (omóplato) y la
articulación glenohumeral. La función del hombro es proporcionar una
plataforma para la extremidad superior y para algunos de sus músculos.
Definidos estos aspectos, pasaremso a describir un poco las patologías específicas
relacionadas con esta área
Trastornos
del manguito de los rotadores y tendinitis del bíceps
Las tendinitis y tenosinovitis son
inflamaciones de un tendón y de la membrana sinovial de una vaina tendinosa.
Los tendones de los músculos del manguito de los rotadores (supraespinoso,
infraespinoso, subescapular y redondo menor), junto con la cabeza larga del
bíceps braquial, son localizaciones habituales de inflamación en el hombro.
En estas localizaciones están implicados
grandes movimientos de los tendones. Durante la elevación, dado que los
tendones pasan a la articulación del hombro y bajo la estructura ósea (el arco
coracoacromial), pueden resultar comprimidos, con la consiguiente inflamación.
Estos trastornos reciben en ocasiones el nombre de síndromes de
impactación.
La inflamación de un tendón puede ser parte de
una enfermedad inflamatoria generalizada, como ocurre en la artritis
reumatoide, pero también estar causada por inflamación local a consecuencia de
irritación y fricción mecánicas.
Osteoartritis
de las articulaciones del hombro y acromioclavicular
Las osteoartritis (OA) de la articulación del
hombro y de la articulación acromioclavicular son cambios degenerativos del
cartílago y del hueso en las articulaciones y los discos intervertebrales.
CODO
Si hablamos de los TME que afectan a los codos
específicamente debemos empezar por la epicondilitis, la cual es un proceso
doloroso que se produce en el codo, en donde los músculos que permiten el
movimiento de la muñeca y los dedos contactan con el hueso.
Cuando este proceso doloroso se produce en la
parte externa, se denomina codo de tenista (epicondilitis externa). Cuando
tiene lugar en la parte interna de la articulación del codo, se denomina codo
de golfista (epicondilitis interna). El codo de tenista es una enfermedad
bastante frecuente en la población general, y en algunos estudios se ha observado
una alta incidencia en algunos grupos profesionales con tareas manuales
intensivas.
Se cree que la epicondilitis está causada por
esfuerzos repetitivos e intensos de la muñeca y de los dedos. La epicondilitis
suele aparecer a partir de los 40 años de edad, y es rara antes de los 30 años.
Los síntomas consisten en dolor, especialmente durante los ejercicios de la
mano y la muñeca; la prensión de un objeto con el codo extendido puede ser
sumamente dolorosa.
Bursitis del olécranon
La bursitis del olécranon es una inflamación
del saco lleno de líquido que está situado en el lado dorsal del codo (bolsa
del olécranon). Puede estar causada por traumatismos mecánicos repetidos
(bursitis traumática o “del estudiante”). También puede ser debida a infección
o asociarse a la gota. Existen tumefacción local y movimiento ondulante a la
palpación debido a la acumulación de líquido en la bolsa. El aumento de la
temperatura cutánea indica la existencia de un proceso infeccioso (bursitis
séptica).
Revisión
Bibliográfica:
Asociación de las Naciones Unidas en Venezuela (ANUV). Diplomado Internacional en Estudios de Ergonomía. (2012)
Enciclopedia de Salud y Seguridad en el Trabajo, Organización Internacional del Trabajo, O.I.T., 3ra Edición, 2001
Enciclopedia de Salud y Seguridad en el Trabajo, Organización Internacional del Trabajo, O.I.T., 3ra Edición, 2001
Elaborado por: Ing. Juan Pacheco.
Correo: 0800.focus@gmail.com
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